Estoy aquí mirándote, muriendo poco a poco por las ganas de besarte, y mientras hablas te miro como si fueres lo único que existe, lo único por lo que vale la pena sonreír. Y te dije que ya se acabó, que no querá seguir adelante pero... ¿ Sabes lo que cuesta mirarte y no poder besarte ?
No hay comentarios:
Publicar un comentario